Me descubro hecho pedazos tras el acto de exhibicionismo. Me descubro incompleto y lleno de miseria. Suspiro la dureza de mis propias palabras y el dolor de mis inventos. Quisiera estar adentro... muy adentro. Soy habitante del vacío...
Bogotano, 27 años. Apacible y melancólico.
"He descubierto un camino sin retorno, donde todas mis pasiones confluyen en un vasto océano de alas y cadenas. He descubierto que la puerta que encierra mis deseos es (en realidad) un laberinto de movimientos repentinos... la invención de mis trastornos. He descubierto que en mis sueños se descifran universos de equivalencias ficcionales donde no existen distancias (sólo miedos)..."
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